¿Qué tanto es tantito? ¿Hasta dónde podemos llegar como novios antes del matrimonio?

por | May 27, 2022 | 0 Comentarios

Por Jackie François Angel

Síguenos en nuestro canal de Telegram:
https://t.me/spesetcivitas

Una de las preguntas que más inquietan a los jóvenes en relación con la sexualidad es: ¿Qué tan lejos puedo llegar con mi novio o mi novia antes del matrimonio?

Me parece de entrada que esta no es la pregunta correcta. Nunca deberíamos preguntarnos ¿Qué tanto puedo hacer o qué tan lejos puedo llegar con esta persona sin cometer un pecado mortal? ¿Qué tan lejos puedo llegar con la mujer de otro? ¿O con un futuro sacerdote? ¿Con una futura religiosa? No debiera ser esta nuestra inquietud. No se trata de qué tan lejos puedo llegar con alguien, o cuánto placer puedo obtener de ellos, o cuánto podemos usarlos. 

La pregunta que debiéramos hacernos es: ¿Cómo puedo ayudar a esta persona a llegar al Cielo? ¿Cierto? Si realmente estamos en este camino hacia la santidad y queremos ser santos, deberíamos preguntarnos en cada relación que tenemos: ¿Cómo puedo ayudar a esta persona a llegar al Cielo? Esto si se trata de nuestros amigos, nuestros padres, nuestros hermanos, o nuestro novio/a y cualquier persona.

¿Cómo puedo llevar a esta persona al Cielo? ¿Cómo puedo ayudarla a ser santa? En vez de ¿Qué tanto puedo usar a esta persona para mi propio placer… justo poquito antes de que sea un pecado mortal?

Preguntarme ¿hasta dónde puedo llegar con mi novio/a? es la pregunta equivocada.

A cada persona que conocemos, deberíamos tratarla como si fuera nuestro hermano o hermana en Cristo, porque realmente lo son. Tenemos que empezar a mirar diferente a la gente. En vez de mirarlos como objetos para usar para nuestro propio placer físico o emocional, tenemos que aprender a mirar a la gente como personas que deben ser amadas.

Así que aquí te van dos historias rápidamente:

Una vez estaba en la playa, y allí había un chico súper guapo jugando en las olas en el mar. Y en ese momento, pude haber elegido desear carnalmente a ese hombre en mi interior, en mi corazón. Ya sabes, empezar a fantasear tipo “Uy, nos vamos a casar y tendremos 5 bebés. Sería genial.” Pero en ese momento sólo tuve que mirarlo como a un ser humano, y decir: “Dios, gracias por este hombre, él es hermoso, y gracias por crearlo tan guapo.” Fin de la historia. ¡Amén! Y eso fue lo que ocurrió. 

Así que tuve que aprender a mirar a los hombres de una manera diferente en vez querer usarlos. Mirarlos como si fueran mis hermanos, diciendo “Gracias Dios por este hombre.”

Otra historia:

Un amigo y yo estábamos paseando en el centro comercial, y había uno de esos carteles gigantes de ropa interior y lencería de mujer. Y los dos giramos la cabeza en sentido contrario. Yo evité mirar el anuncio porque, como mujer, a veces estoy tentada a compararme con otras, como con estas modelos. Y mi amigo evitó mirar el anuncio diciendo “Esa es la hermana de alguien, la hija de alguien, y se llama Dolores.” Y yo pensé “¿Qué rayos estás haciendo?” y él me dijo: “Bueno, un sacerdote me dijo una vez, que si estoy tentado a desear lujuriosamente a alguien, que le pusiera nombre a esa persona.” “¿En serio? ¿Dolores? ¡Así se llama mi abuela!” Pero me pareció realmente bonito que hubiera chicos así en el mundo, que, en vez de tratar automáticamente a esa persona como un objeto, miraran a esa mujer como la hija de alguien o la hermana de alguien. “No quiero usarla en mi interior, ni en mi mente, ni en mi corazón. Yo quiero amarla como hija de Dios.”

Entonces, ¿hasta dónde puedo llegar con mi novio/a? Realmente nos estamos haciendo la pregunta equivocada. Tenemos que cambiar totalmente nuestra mentalidad, todo nuestro chip. Necesitamos aprender a amar a la gente y no a usarla.

Si quieren algunas pautas reales, porque muchos de ustedes piensan, “¡Oh, no! ¡Yo necesito reglas! Dame algo concreto.” Les daré algunas recomendaciones.

Así que primero; si quieres saber hasta dónde puedes llegar con tu novio o tu novia, este es un buen parámetro: Si lo puedes hacer a plena luz del día, en frente de tu abuela, o del Papa Francisco, vas bien. Pero, si tienen que esconderse o ir a lo oscurito para hacerlo, alejándose lejos del público, es porque saben que eso no está bien, que les da vergüenza, porque saben que deben ocultar sus actos, porque no están amando a esa persona, la están usando.

Es un criterio. Si lo pueden hacer a plena luz del día, enfrente de tu abuela o del Papa Francisco, van bien.

Otra historia:

Un sacerdote me lo explicó muy bien. ¿Cómo puedes distinguir entre usar a alguien y amar a alguien? Aquí hay una diferencia perfecta: existe una diferencia importante entre “afecto” y “excitación”. Las muestras de afecto son geniales, son buenas, bonitas. Por ejemplo, tomar de la mano, dar un beso, dar un abrazo. Son muestras de afecto que puedes hacer a plena luz del día en frente de tu abuela, sin sentir vergüenza. Pero cualquier cosa que te lleve a sentir excitación, eso está reservado para el matrimonio. 

Es una enseñanza de la Iglesia que el sexo es tan bueno, tan bonito, tan sagrado, que pertenece a un esposo y a una esposa. Así que cualquier cosa que te lleve a la excitación, al acto de consumación, al sexo, a ser un solo cuerpo, una sola carne (como dice San Pablo en la primera carta a los Corintios, capítulo 6), cualquier cosa que cause esa excitación, que eche a andar ese tren, que desboque ese tobogán, está reservada para el matrimonio.

Y ya sé que muchos de ustedes estarán pensando, “¿¡Qué!? ¿En serio? ¡Es una locura!” Y ¡Claro! Porque la cultura predominante nos dice que está bien tener sexo en una cita, que el sexo no es para tanto. Es muy interesante que nuestra cultura está obsesionada y ahora todo tenga que ver con ligar y tener sexo, y luego nos sentimos miserables y nos preguntamos por qué… Pues ¡porque no estamos hechos para tener sexo con cualquiera! Estamos hechos para unirnos a una persona por toda la vida hasta que la muerte nos separe.

El punto es que existe una diferencia entre afecto y excitación. Cuando estás saliendo con alguien, debes compartir lo siguiente: “Oye, no podemos hacer esto porque detonaría el tobogán, activaría los motores de la excitación.” Mucho ojo, porque hombres y mujeres fuimos creados diferentes y sentimos diferente.

Un amigo me contó que cuando estaba saliendo con su ahora esposa, estaban en el sillón viendo una película, y él puso su brazo alrededor de sus hombros, y ella pensaba “Oh, esto es muy lindo.” Y de pronto ella puso su mano sobre el muslo de él, toda contenta pensando “esto es tan bonito y lindo” y él por su parte sintió: “¡Alerta! ¡Alerta! ¡Alerta! ¡El tren de la excitación se activa! ¡Ahhhh!” Entonces, para él era importante comunicarlo: “Oye, mira, hay algunas cosas que ocurren cuando me tocas de cierta manera. Ya sabes, activan el tobogán de la excitación.” Así que es bueno comunicar eso a la persona con la que estás saliendo.

Cuando se trata de besos, incluso los besos apasionados pueden detonar el tobogán de la excitación. Y quizá estás pensando “Es una locura, ¿estás diciendo que ni siquiera podemos besarnos?” Ese es el asunto otra vez. La pregunta no es ¿Hasta dónde puedo llegar? Sino ¿Cómo puedo cuidar y proteger a esta persona, en su cuerpo, mente, alma y corazón? Cuando te topes con el futuro esposo/a de tu ex novia/o el día de su boda, en vez de decir, “Oye, hasta aquí llegué con tu esposo/a”, ojalá puedas decir, “Oye, cuando estuve saliendo con esta persona, no me propasé con ella, la cuidé y protegí para ti. Yo le ayudé a crecer en santidad para ti, para su vocación.” Y no que digas, “Mira, quise ver hasta dónde podía llegar con él o con ella y casi llevarlo a pecar.” Creo que no. 

Tenemos una gran capacidad para el bien y la santidad, pero de igual manera tenemos una gran capacidad para el mal y el pecado. Y yo conozco en mi corazón todas las maneras en las que he manipulado, en las que he atraído hombres hacia mí, en las que he utilizado a un hombre a mi conveniencia, emocional y físicamente. He tenido que mirar en mi interior esa fealdad de mi corazón y pedirle a Dios que me ayudara a purificarlo, que me perdonara. “Dios, ayúdame a purificar esos malos deseos de mi corazón, el querer usar a alguien como objeto y manipularlo sólo para usarlo.” Pregúntate sinceramente cuáles son tus intenciones.

Es gracioso, un día oí a un papá decir que a todo futuro pretendiente de su hija él le advertía: “Oye, amigo. Cualquier cosa que le hagas a mi hija, yo te lo haré a ti.” Me causó gracia. “¡Eso significa que hay muchas cosas que no le puedes hacer a mi hija, eh!” ¡Híjole! Ni hablar. Es verdad. No deberíamos hacer nada íntimo a la hija de alguien, a la futura esposa de alguien, o al futuro esposo de alguien. Cuando estamos saliendo con alguien que quizá será el marido o la mujer de otro, o incluso aunque fuera nuestro futuro esposo o esposa, ¡uno no está casado hasta que se casa!

Cuando yo salía con mi ahora esposo, e incluso ya comprometidos, pensaba “Tengo que tratarlo de tal forma que si, por una pequeña casualidad, algo le pasara y él muriera antes de casarnos, y estuviera llamada a casarme con otra persona, ¿qué pasaría?” Aunque estuviera tan enamorada de él, y queriendo entregarme por entero a él, hasta que no estuviéramos realmente casados yo tenía que tratarlo como si él no fuera mío aún, porque así era. Tenía que amarlo de la manera apropiada, sin propasarme, por si acaso y porque era lo correcto.

Esto implica mucha oración, mirar los deseos de nuestro corazón, y pedirle a Dios que destruya esos deseos egoístas de nuestro corazón y que nos ayude a amar de verdad y no usar a la gente.

Espero que esto te haya ayudado un poco y rezo para que Dios te conceda los frutos de Su espíritu, que Dios te conceda la virtud de la castidad, autocontrol, modestia, paciencia, amabilidad y amor. Ven Espíritu Santo, danos esos dones, ayúdanos a producir esos frutos, para que así podamos ser para el mundo luz del radiante amor de Dios. 

Que Dios te bendiga y ¡ánimo!

Traducido y adaptado por Irene González Hernández del video “¿How far is too far before marriage?” de Ascension Presents

Irene González Hernández

Irene González Hernández

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Entradas relacionadas

MDNMDN